Hace unas semanas me llegó un hermoso regalo, el libro «El poder de la maternidad. 12+1 Fotohistorias de mujeres madres» escrito y fotografiado por Noemí Genaro. Lo leí enseguida, fue como un bálsamo, porque me vi reflejada en las historias de estas madres y me sentí más comprendida en este puerperio tan emocional que estoy viviendo. Vibré más conscientemente en el poder de la maternidad, porque realmente la maternidad empodera, si estás bien acompañada.
Así que enseguida que pude contacté con Noemí (fotógrafa y acompañante familiar) y fascinada por su trabajo le propuse que nos contara algo sobre cómo acompaña a esas mujeres que van a convertirse en madres. Ella aceptó con total predisposición y nos brinda un poquito de su sabiduría de comadre en este artículo, que acaba con el regalo de un ejemplar de su libro.
Muchísimas gracias Noemí por tu aporte ¡y por tu trabajo de visibilizar la maternidad!
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Acompañar la maternidad
Durante la gestación un nuevo ser crece en el vientre materno. Esto conlleva un esfuerzo físico y desencadena grandes cambios emocionales. Se genera una alerta en la mujer-madre para asegurar la supervivencia de la criatura. Es un sentimiento completamente nuevo, una emoción singular con la que una madre primeriza no se había encontrado anteriormente. El hecho de que una nueva vida dependa de ti supone una responsabilidad enorme. Se activa un hilo de conexión entre la madre y el bebé que ya es para toda la vida.
Acoger una vida significa abrirse
La sensibilidad de las embarazadas se agudiza, por esta apertura, por el potente instinto que aún nos guía para que el bebé esté sano. Por ello es importante saber cuidarse, respetarse, hacerse la vida sencilla. Estamos en un momento que implica un esfuerzo físico y emocional extraordinario, así que vamos a intentar no añadir elementos que lo hagan aún más complejo. Eso significa, por ejemplo, rodearse de personas que te hagan sentir bien, buscar un ambiente adecuado para dar a luz, vivir en una casa segura y confortable.
En este momento más que nunca es legítimo buscar lo que nos nutre, lo que nos hace bien, lo que nos resulta fácil. Para eso es fundamental saber elegir, saber decidir y, por supuesto, responsabilizarse de las propias elecciones y sus consecuencias. No es momento de dejar que otros decidan por ti.
El papel de la acompañante familiar o doula
Las personas que acompañamos a la mujer cuando va a convertirse en madre tenemos la labor de facilitar su proceso. Permitir que encuentre su propia y única manera de ser madre. Hay tantas maternidades como madres y todas son adecuadas.
Acompañar significa buscar el modo en que la mujer se sienta segura, con sus propios recursos. Una acompañante familiar representa un espacio neutro, libre de juicios, en el que la mujer se apoya para elegir su maternidad. En ocasiones una pareja, una amiga o un familiar realiza este papel estupendamente, pero otras veces las personas que rodean a la embarazada la importunan con consejos y críticas que no ha pedido y le dificultan su proceso.
La doula o acompañante familiar crea un vínculo de intimidad con la mujer durante todo el embarazo. La observa y la conoce, va tomando anotaciones de sus expectativas y temores, de sus sensaciones, de sus deseos. Cada mujer es distinta y no hay un modo de acompañar único, se hacen propuestas en los encuentros y la mujer va decidiendo cómo vivir su proceso.
¿Qué aspectos trabajar para preparar la maternidad?
El vínculo
El vínculo con el bebé es uno de los aspectos principales que se puede trabajar juntas. Saber si ha sido un bebé esperado o que ha llegado de sorpresa, qué lugar ocupa en la familia: si hay más hijos, nietos, sobrinos… Hacer una relajación, una visualización, un dibujo, escribir una carta o hablarle, son distintos ejercicios que se pueden proponer a la futura mamá.
Cuando nace un bebé, también nace una madre, un padre, una familia. El equilibrio existente cambia, se mueven las fichas del juego. Cambia la familia que se acaba de crear, pero también afecta a las familias de origen. Es importante estar atento en estos procesos de cambio, no perder de vista el respeto por las personas protagonistas, y permitir que puedan elegir cómo vivirlo. Toda la familia alrededor del bebé debe moverse para hacerle hueco y que tenga su propia voz.
Por tanto el acompañamiento no es sólo para la mujer, sino también para el hombre, para la pareja, si así lo desean. Se pueden realizar uno o varios encuentros en los que se explora la comunicación entre ambos. Qué expectativas tienen sobre el parto y sobre la llegada del bebé, cómo se imaginan que será la crianza…Se busca el acercamiento y la conciliación, escuchando las versiones de ambos. El objetivo es minimizar las expectativas, estar abiertos a lo que pueda suceder, aceptando la realidad del momento en el que se está y ser muy prácticos.
La organización del hogar
En este caso hablamos de cómo gestionar las visitas y saber poner límites para que la intimidad y el descanso de la madre y el bebé se respeten. Es importante llegar a acuerdos con la pareja para que quede claro quién va a venir, cuando, cuánto tiempo se va a quedar y qué va a aportar a la familia. Buscar ayuda de familiares, amigos o profesionales que nos faciliten las tareas cotidianas del cuidado de la casa. Que la nueva madre se encuentre la casa lo más limpia y ordenada posible en su puerperio puede ser un motivo de relajación y buen humor.
Preparar la maleta
En los encuentros también se pueden preparar de antemano los objetos o recursos materiales que necesitamos para la llegada del bebé. La bolsa para ir al hospital, tener su ropita y otros accesorios, suficiente comida en casa… para poder centrarnos lo más posible en disfrutar de los primeros momentos.
También se prepara la maleta emocional. En ella metemos todos aquellos recursos que nos hacen sentir bien y nos pueden ayudar a sentirnos más seguras en el momento de convertirnos en madres. Por ejemplo, las personas que nos acompañan y nos sirven de guía (familiares, amigos y personas de referencia), la música que nos gusta, paisajes o lugares especiales para nosotras, olores, sabores y sensaciones que evocándolas nos permiten sentir fuertes y relajadas. Una vez que la mujer ha configurado su maleta emocional personal, sabe que puede acudir a ella con su pensamiento, que la tiene presente a su lado, tanto en el momento del parto, como luego en la crianza de su bebé.
Cuando acompaña, la doula se presenta disponible y cercana, y pone su tiempo a disposición de la embarazada por medio de encuentros, llamadas y mensajes. La mujer sabe que cuenta con alguien a su lado que no la juzga y que la respeta. La acompañante deja a un lado su historia personal, sus creencias y experiencias para poder acompañar a la mujer como ella desea, desde el silencio y la neutralidad, desde un estar en el presente, en el aquí y ahora, sin interferencias.
La doula representa el amor incondicional que la mujer embarazada puede darse a sí misma. Es alguien que en realidad está dentro de ella, alguien que la cuida de verdad. Si la mujer encuentra el poder y la fuerza que están en su interior, sabe expresar sus necesidades tranquilamente y buscar el modo de hacerlas realidad, se sentirá más preparada y confiada ante el reto de convertirse en madre, dar a luz y cuidar de una criatura. La mujer encontrará su modo único de ser madre si se le deja el camino libre de obstáculos.
Por Noemí Genaro. Autora del libro: “El poder de la maternidad. 12+1 Fotohistorias de mujeres madres.”
Fotógrafa y acompañante familiar. Doctora por la Universidad de Granada con una tesis sobre Autorretrato Fotográfico e Identidad. Se ha formado como acompañante familiar (doula) en EcoMondo Doula en Italia. Ha trabajado con colectivos de mujeres en los campos de refugiados saharauis en Argelia y con mujeres que han sufrido violencia de género en Granada. En la actualidad acompaña a mujeres y familias en el proceso de maternidad tanto en Andalucía (España) como en el Piemonte (Italia). Es madre de una niña y de un niño.
Puedes contactar con Noemí aquí.
Sorteo un ejemplar «El poder de la maternidad»
Si quieres el libro de Noemí, puedes reservarlo en nuestro Atelier aquí ya que nos llegará en pocos días al almacén y también puedes participar en nuestro sorteo hasta el 21 de marzo dejando un comentario en este post y comentándonos sobre cómo fue tu acompañamiento para ser madre, ¿estuviste acompañada? ¿Echaste de menos ese apoyo? ¿Qué recomendarías a una madre primeriza?
Y ya sabes que si compartes el post en Facebook, nos ayudas un montón a que el poder de la maternidad tenga más visibilidad y tienes más participaciones extra (contabilizamos los comentarios y los compartidos). ¡Gracias!
Resultado Sorteo:
Comentario 5: Magda
¡Enhorabuena! Y muchas gracias a las participantes por compartir vuestras experiencias, vuestros comentarios son muy enriquecedores.
Cada una de nosotras tiene un pedacito del puzzle que aportar. – Noemí Genaro
Oliva dice
Aissss… Cómo m duele recordar el post parto… No sé cómo explicarlo, no estuve sola físicamente.. Pero si me sentí muy muy sola emocionalmente… Mucho!!!
🙁
A las madres primerizas les recomiendo q se informen de todo: parto, lactancia,crianza… Y q se queden con lo q más se adapte a ellas y su familia
Isabel dice
Un libro precioso!
Yo me sentí muy acompañada por mis matronas y mi familia.
Lo que recomendaría a una mamá primeriza es que ante todo confíe en su instinto y sabiduría interior, y que tome las decisiones desde ahí.
Anna dice
A mi me habria gustado compartir mis embarazos y post partos con una doula…me senti muy sola y tube que resistir juicios y consejos y tuberculosi que ser decidida en escuchar mi intuicion y corazon…una d’ou la. ..es la clave a falta de tribu
Laura dice
Me sentí falta de tribu pero a la vez muy conectada conmigo misma. Recomendaría meditación,naturaleza y soledad para aprender a escucharnos en el embarazo,y despuès todo eso y hacer tribu.
Magda dice
Mi parto fue muy respetado pero finalmente no salió como me hubiera gustado. El postparto fue muy duro a nivel emocinal. Recomendaria trabajar las sombras de la infancia antes de ser mami. Gracias.
De mi casa al mundo dice
Enhorabuena Magda! Has resultado la ganadora del sorteo. Por favor mándame un mail con tus datos de envío y te mandamos tu libro.
Muchísimas gracias por participar y espero que lo disfrutes!
Sol Muñoz dice
Yo no tuve mucho acompañamiento durante mis pérdidas y mi embarazo a término posterior, salvo de mi pareja y alguna amiga disponible en ese momento. Ahora mismo no dudaría de disponer de una doula porque considero que es primordial llevar un embarazo sin miedos. Creo que hay que disfrutar del embarazo con bailes, comidas sanas y apetitosas, paseos por el campo, etc. Comparto en Facebook.
Mónica dice
Todavía estoy sanando la soledad que sentí durante mi embarazo, parto y postparto. En su momento no fui consciente de ello, pero todavía me asusto al recordar lo perdida, sola y pequeña que me sentí entonces.
Esa es una de las razones por las que me estoy formando ahora como doula: Me gustaría ayudar a que otras mujeres no se sientan así, que tengan a alguien cerca que les de el apoyo y el cuidado que necesitan en un momento tan sensible como ese.
Evelyn Pérez dice
Qué proyecto tan interesante! Me parece un gran trabajo!
Gracias por ello Noemí y gracias por la difusión Aguamarina
Melania dice
Yo estoy embarazada actualmente y en este momento de mi vida intento escucharme muchísimo, conectar conmigo misma y leer sobre todo lo que vendrá pues no puedo evitar tener algo de temor por el puerperio y por como viviré la maternidad. Muy interesante el post y todos vuestros comentarios. Gracias!
Jimena dice
Buenos días. Estoy muy feliz de haberme conectado con Noemí y expectante de conocerla. Soy jimena madre y doula también. Desde que nació mi hijo la maternidad me transformó y por esta razón decidí acompañar a otras mujeres para que encuentren su propio camino. Gracias. Me encantó la nota y sobre todo esta frase… La doula representa el amor incondicional que la mujer embarazada puede darse a sí misma. Es alguien que en realidad está dentro de ella. Besos!
sharon dice
Yo me sentí muy tranquila y bien durante mi embarazo y el ouerperio, pues desde siempre he confiado y confío en el poder de la naturaleza y de la mujer. No hay nada más bellos que convertirte y ser mamá. Pero si que sentí falta de apoyo en el parto. Mi bebe nació por cesárea y no sentí ningún apoyo de mi matrona, en el parto vino otra matrona y después ni se preocupó en preguntarme como estaba… menos mal que tenía a mi gran amiga, maestra y matrona Teresa que vino a vernos a casa y con sus consejos puede cambiar tantísimo.
Mi consejo para las futuras mamás? Qué dibujen, dejen expresar su creatividad, bailen, caminen en la naturaleza y que escuchen a su interior. A esto le añadiría que dejen de lado la tecnología y las redes sociales, especialmente en los últimos meses para permitir que su instinto pueda hablar y expresarse.
Gracias por compartir la maternidad como debe de ser compartida.
Raquel dice
Mi consejo para las futuras madres es trabajar las emociones al máximo. Aceptar los miedos y sacarlos a la luz para poder estar tranquila pero desde dentro nunca desde la imposición.
Creo que también es importante ser consciente de que las expectativas son inevitables pero pueden cumplirse sólo en parte o en absoluto. La llegada de un hijo es un cambio para el que te puedes preparar pero no lo puedes planificar.
Mi embarazo y mi puerperio fueron bastante bien. Sólo tuve molestias con la episiotomia y no fue hasta meses después que me di cuenta de la herida emocional que me había dejado el parto. No es necesario que haya complicaciones médicas para que nosotras nos sintamos mal y lo arrastremos ante la falta de comprensión de la gente que nos rodea.
Por lo tanto, mi último consejo es rodearte de gente que te nutra. No tienen porqué pensar como tú pero sí respetarte y hacerte sentir bien. Creo que es el momento propicio para dejar en nuestra vida sólo lo que nos aporta bienestar porque el postparto puede ser duro física y emocionalmente, cuanto más acogedor sea el entorno mejor podremos afrontar esta experiencia que sin ser fácil es mágica.
Anna dice
Me llamo Anna i estoy justo en las 40 semanas de mi primer embarazo a término! He intentado llevar la gestación más consciente que me ha sido posible, abrazando contradicciones, dudas, crecimiento, aprendizajes. Mi principal sostén, Óscar, el papá, las comadronas que nos acompañaran en el parto en casa, la red de apoyo entre mujeres manada de mi entorno a las que quiero y admiro y de las que aprendo cada día. En la recta final del embarazo se me han despertado fantasmas relacionados con el puerperio y mi Renacimiento como mujer en esta etapa que estoy por vivir: vértigo y ilusión a dosis iguales. Sin duda creo que el libro arroja luz sobre el tema y me encantaría poder leerlo.
Estel·la Prado dice
Yo no soy madre todavía. Donde sí que estoy es preparandome para ser yo la que acompañe a las mujeres embarazadas, en los partos y en los postpartos como doula.
Rosa dice
Gracias por éste árticulo destapando un tema tan ignorado. Yo también embarazada de mi tercer bebé, después de dos hijos ya mayorcitos, moviéndome en emociones y dudas que ya creía no volvería a sentir, y aquí están…Mi primer puerperio fue un golpe tremendo entre expectativas y realidad. El segundo fue divino; hubo mucha más confianza en mí misma. Después de tantos años, me siento tan insegura como la primera vez…veremos.
Luz Viudes dice
Gran trabajo Noemí! Orgullosa de compartir pasión-profesión, amistad y primera maternidad. Te siento valiente y Serena, y me encanta! Y mi deseo (que no consejo) a las futuras madres es que puedan entregarse para vivir la maternidad más personal y única, que es la mayor experiencia posible para crecer.
Alba dice
Hola!
A mi me regalaron el libro de Laura gutman «la maternidad y el encuentro con la propia sombra» que me sirvió como terapia, me acompaño mucho y me dio mucha luz en momentos difíciles. Además mi pareja me ayudó mucho y lo sentía cerca aunque también tenía momentos de sentimientos de soledad y dudas y lo pasas mal. Pero k lindo es todo el proceso!
Marisa dice
Mi embarazo fue estupendo y lo viví con mucha alegría y acompañada. El parto no fue como yo esperaba, pero el ver, sentir y tener a mi hijo fue lo mejor que me ha pasado en la vida. A las futuras mamás les recomiendo que se cuiden, descansen, lean libros sobre maternidad y que se rodeen de personas que las apoyen y las mimen.
Eva dice
Yo me sentí arropada por mi pareja y amigas. En el.parto y poatprto no tanto. Es muy importante estar preparada para un cambio tan importante como convertirnos en madres!
Núria dice
Recuerdo demasiado ruido, poco silencio, la pròxima vez serà diferente.
Gillian dice
Recuerdo compañía, compenetración y amor con mi pareja. Y muchos mimos y ayuda de mi entorno. Pero también miedos y dudas. Informarse, rodearse bien y entregarse de lleno a ese volcán que es la maternidad, son para mi las claves.
Yolanda dice
Hola a todas,
Después de planificar durante largo tiempo el parto y post-parto me sentí sola, decepcionada, muy confusa y juzgada. No se cumplieron ninguna de las expectativas en el parto ni después porque no puede hacer esa entrega a la maternidad como vosotras mencionáis y que tanto envidio. Después de 15 de horas de parto terminó en cesárea y los médicos entregaron al niño a su padre. El bebé, al nacer, miró a su papá en lugar de a mi mientras yo estaba tendida en la camilla del quirófano y a los pocos días me fallaban las manos… si a esto le añadimos otros detalles de la familia, de la pareja, creencias, pues… es duro de contar y creo que aún después de dos años, no lo he superado porque lloro.
Gracias
NOEMI dice
Gracias a todas por compartir vuestras vivencias. Y gracias Aguamarina, con los comentarios se hace un pequeño círculo de mujeres también que nos acompañamos…
Raquel dice
Participo en el sorteo, me encantará recibir, leer y releer el libro. Yo pasé la maternidad profundamente sumergida y sí es importante la voz de otras madres y abuelas conscientes y respectuosasa. Gracias
Sole guinea dice
Soy mamá de 2, la primera nació en un parto hospitalario tras un intento de parto en casa. Fue un puerperio durísimo, que me transformó mucho, a nivel profesional ( ahora soy doula y acompaño otras mujeres en su perderse y encontrarse) y a nivel personal.
Mi segunda hija nació en casa, con mi compañero, mi comadrona -presentacion y dos amigas-doulas.
Felicidades por tu blog y a Noemí por el libro, me encantaría que me tocara
Maria dice
Que buena pinta tiene el libro, que pena o haberlo tenido antes de mi embarazo. Yo mi embarazo lo viví de una manera maravillosa, realmente no me sentí muy apoyada por mi pareja pero estaba tan encantada de estar creando una vida dentro de mi que ni necesitaba más.
Montse dice
Me parece un post muy interesante para las que estamos embarazadas en este momento! Muchas gracias!
Yo estoy viviendo el embarazo acompañada de mi familia (somos una pequeña-gran tribu de 4 hermanas), de mi pareja y de una doula. Creo que la experiencia de tener una doula a tu lado acompañándote sobre todo en el plano emocional es muy importante.
Un abrazo!
Elisa dice
En mi parto me senti muy acompañada en el clinico,bastante respetada con lo que queria y apoyada por mi pareja al cien por cien.
Me hubiera gustado tener a mi hijo en la bañera del clínico pero al final no pudo ser,aunque hicimos todo lo posible.
Yo a una madre primeriza le diria que disfrute del momento y confie mucho en su cuerpo.
Gracias por ese libro.